Colon irritable: Cómo viajar en avión
Viajar ya es fuente de estrés para mucha gente con colon irritable y viajar en avión puede resultar todavía más agobiante.
Si no te queda otra que subirte a un avión, te contamos algunos trucos para que tengas un vuelo tranquilo y sin síntomas.
Vuelos cortos
Si tienes la suerte de que el vuelo sea corto, lo mejor es comer bien antes de volar y volver a comer una vez que hayas llegado.
Para matar el hambre durante un vuelo corto un truco es llevar algunos frutos secos envasados, que son nutritivos y saciantes, como por ejemplo un mix de nueces, cacahuetes o nueces de macadamia.
Vuelos largos
Si lo que te espera es un vuelo largo, aquí la cosa se complica y puede ser buena idea planificar un poco más.
Es interesante contactar con la compañía aerea para ver qué tipos de adaptaciones del menú se pueden hacer.
Alguna gente se pregunta si es buena idea pedir un menú sin gluten durante el vuelo, pero puede ser un error. ¿Por qué?
Por que un menú sin gluten puede estar compuesto por una tortilla de patata con cebolla, una manzana y un vaso de zumo.
Todo mal.
En estos casos puede ser mejor comer trigo en lugar de un menú sin gluten. Si fuera posible, pide a la compañía aérea que excluya de tu menú los alimentos que te puedan resultar más problemáticos como por ejemplo el ajo y la cebolla.
Pero, en todo caso, algo a tener en cuenta es que la comida de las aerolíneas no suele contener grandes cantidades de un sólo alimento.
Eso es una buena noticia ya que aunque te puedan servir algunos alimentos con un alto contenido en fodmap la cantidad que incluya tu menú puede ser baja en fodmap.
Un ejemplo: es posible que el menú sólo incluya 2 ó 3 ramilletes de brócoli, 2 rodajas de remolacha y una poca cantidad de calabaza que aunque son ingredientes clasificados como altos en fodmaps en esas cantidades son bajos en fodmap.